Graves incidentes demoraron el festejo de Belgrano en el Monumental

Antes de que llegara a cumplirse el tiempo reglamentario, el árbitro Sergio Pezotta debió suspender el partido porque los hinchas de River no soportaron el descenso al que lo había mandado Belgrano con el empate en el Monumental y comenzaron a tirar piedras hacia la cancha.

Incluso, algunos cruzaron el tejido que separa la tribuna del campo de juego y los bomberos los"sacaron" con chorros de agua.

Pero claro, eso no terminó ahí. Los propios jugadores de Belgrano debieron retirarse bajo los escudos de la policía porque los hinchas del "Millo" también se la agarraron con los cordobeses. Ribair Rodríguez no quiso que la seguridad lo cubriera, intentó salir sin protección y casi recibe un piedrazo.

Más tarde, la hinchada de River comenzó a destruir parte del Monumental y se trenzó en lucha cuerpo a cuerpo con la policía. También afuera, sobre Figueroa Alcorta, hubo duros enfrentamientos. Los hinchas con piedras y palos, y la policía con balas de goma y gases.

Pero no fue todo. Enseguida, lograron superar el vallado de seguridad y destrozaron todo el hall central del club, debajo de la platea San Martín.

La batalla del hall fue intensa y si bien la Policía logró dispersar a los vándalos, un efectivo de infantería habría sufrido una lesión en el cráneo. Además, hay varios policías con contusiones o heridas menores.

Además, otros barras ingresaron por la puerta de acceso para los periodistas y agredieron inclusive a algunos hombres de prensa.

También se produjeron incidentes en las adyacencias de las canchas de tenis. Están llegando refuerzos policiales cuando la batalla ya lleva más de 45 minutos.

Mientras tanto, otro grupo numeroso de simpatizantes, los de comportamiento pacífico, espera en las tribunas para salir debido a las corridas que se producen en Avenida Udaondo.

 

Fuente: lavoz.com.ar