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18 de julio de 2011

Por miedo a enfrentar a Luis Juez, De La Sota abortó el debate en Córdoba

Solamente Santa Fe consiguió, hasta ahora, el debate civilizado de los candidatos. Ni en Ciudad de Buenos Aires ni en Córdoba han prosperado iniciativas similares. Todo indica que la democracia sigue en transición en la sociedad argentina.

Luis Juez, Oscar Aguad y José Manuel De La Sota

Luis Juez, Oscar Aguad y José Manuel De La Sota

Si ni siquiera hay un debate civilizado entre los candidatos, es obvio que no habrá diálogo cuando alguno de ellos llegue al gobierno y el otro sea oposición. Así, fracasan las prácticas políticas propias de la democracia representativa. Es evidente que la sociedad argentina todavía vive una transición hacia la democracia.

Carlos Jornet lo explicó así en el diario La Voz del Interior, de la ciudad de Córdoba:

"Con la decisión del candidato de Unión por Córdoba, de no debatir con los postulantes de las otras dos fuerzas mayoritarias –el radical Oscar Aguad y Luis Juez, del Frente Cívico–, la Provincia pierde la oportunidad de consagrar los debates preelectorales como práctica política.

Horas antes de que José Manuel de la Sota comunicara su negativa, Santa Fe vivía el primer debate de su historia política.

El reglamento y la temática aplicados allá fueron muy similares a las adoptados aquí en 2007, cuando el actual gobernador, Juan Schiaretti, confrontó propuestas con sus entonces rivales, Luis Juez y Mario Negri.

Aquella experiencia de cuatro años atrás era la segunda en Córdoba, luego del cruce que protagonizaron el justicialista Horacio Obregón Cano y el radical Víctor Martínez antes del balotaje definitorio de la elección de 1973.

La dictadura y una democracia que recién empezaba a reaprender las virtudes del diálogo impidieron luego repetir la práctica, en especial por la negativa recurrente de Eduardo Angelóz y, luego, de Ramón Mestre.

Paradójicamente, en esos años era De la Sota quien desafiaba a debatir. El argumento al que ahora apela para revisar su posición –pese a reconocer “la importancia de los medios de prensa en los procesos electorales y en el control de la transparencia de los actos de gobierno”– es que existe un clima de agravios que, sin mencionarlo, imputa al candidato del Frente Cívico, Luis Juez.

Riña cara a cara

Razones no le faltan al ex gobernador. El jueves por la noche, cuando el debate estaba aún en negociación, Juez escribió que lo más aproximado que los “pobres políticos” pueden ofrecer a la teleaudiencia que demanda sexo y peleas “es una buena pelea”.

“No –aclaró– de esas indirectas, que se protagonizan cruzando frases a través de los medios, sino una buena riña cara a cara, de modo que los espectadores puedan tener el enorme placer de no sólo ver volar las piñas, sino de disfrutar viendo cómo sufre el que las recibe”.

Y precisó: “Piñas conceptuales, por supuesto, piñas verbales, bueno sería, pero piñas al fin, sin lo cual las plateas se aburren y chiflan”.

Si lo que quería era forzar a su adversario a debatir, logró el efecto contrario: le dio argumentos para rechazar la convocatoria. ¿O acaso Juez tampoco quería debatir? (...)".

En esta etapa de la campaña, lo que sí hizo Juez fue difundir un documento de los economistas de su Partido Nuevo, afirmando que la provincia de Córdoba pierde terreno ante Santa Fe.

Así lo explicó el diario Comercio y Justicia:

"La actividad económica de la provincia de Córdoba, medida como Producto Geográfico Bruto (PGB), perdió peso con respecto al Producto Interno Bruto (PIB) nacional en los últimos 10 años, al tiempo que también quedó relegada con relación al crecimiento experimentado por la provincia de Santa Fe, un distrito comparable, atento al nivel de población y de producción de diferentes bienes y servicios”.

Los datos que reflejan la evolución de los números de las dos provincias y de la Nación aparecen reflejados en un informe elaborado por la Comisión de Economía del Partido Nuevo, como parte del análisis de la economía de Córdoba con vistas a una eventual administración de Luis Juez.

El documento -que en rigor no profundiza con respecto a las causas de la pérdida de peso relativo de la economía cordobesa en relación a Santa Fe o a la nacional- sí abunda en cifras comparativas que dan cuenta de ese desempeño menor y que el Partido Nuevo se encarga de recalcar que coincide con el período de las administraciones de Unión por Córdoba en la Provincia.

“Pese a las condiciones económicas favorables y a los valores internacionales de los productos agrícolas, Córdoba no ha podido aprovechar plenamente esa situación y reflejarla en el crecimiento de su economía”, indicó a Comercio y Justicia Beltrán Corvalán, uno de los referentes económicos de los equipos técnicos del juecismo.

Con respecto a la Nación, el documento resalta que -pese a la evolución positiva del precio de las commodities agrícolas en los últimos años- las tasas de crecimiento económico de la provincia de Córdoba fueron inferiores con respecto a las de la Nación.

Desde el año 2002 en adelante, período de altísimo precio de los granos, la Provincia de Córdoba muestra tasas de crecimiento muy inferiores a las tasas de crecimiento de Nación. En los siete períodos considerados, la Provincia creció menos que Nación en seis períodos (2003; 2004; 2006; 2007; 2008 y 2009) y sólo en uno su tasa de crecimiento fue mayor (período 2005)”, refleja el estudio.

En ese marco, el informe muestra que la participación de la economía provincial con relación a la de Nación disminuyó considerablemente desde el 8,95% en 2002 al 7,86% en 2009.

“Este indicador es de suma importancia, dado que la participación de una jurisdicción dentro de un total está conformada por cuestiones estructurales, georreferenciales, productivas, institucionales, sociales y culturales. Esta disminución de la economía cordobesa nos está indicando que hubo retrocesos de índole estructural en la provincia en relación con otras provincias, no solucionables en el corto plazo”, indica el documento.

En otro orden, el informe realiza una comparación entre el PGB per cápita de Córdoba y el de Santa Fe como así también el PIB nacional, como variable clave para medir no sólo el crecimiento de una economía sino particularmente la situación de la población y su calidad de vida.

Según el estudio, hasta 2001 se observa como los productos per cápita de Córdoba y de Santa Fe se ubicaban por debajo del PIB per cápita de Nación. A partir del año 2002 se observa que el producto per cápita de Santa Fe superó ampliamente la variable nacional y la de la provincia de Córdoba, pasando ésta a ser la menor entre los tres indicadores.

Asimismo, se observa que en el período 2002-2009, el Producto Geográfico Bruto per cápita de Córdoba fue en promedio 10,3% inferior al de Santa Fe y cuatro por ciento inferior al de Nación. En el año 2009 en particular el producto per cápita de Córdoba fue 9,6% menor que el de Santa Fe y 5,5% inferior al de Nación.

“Para tener una dimensión de la magnitud del crecimiento que no fue, se puede estimar que si la provincia de Córdoba hubiese mantenido la participación que tuvo en la economía nacional antes del año 2002, con la diferencia entre lo dejado de producir por la provincia con relación a la Nación se hubieran podido fabricar 20 mil casas por año” (...)".

Fuente: Urgente24

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